La Venus en Cáncer de Angelina Jolie

No es raro que la mujer más hermosa del celuloide, desde que nos dejó la mítica Marilyn Monroe, tenga a Venus pegadita al Ascendente, ¿no?

Sí, estoy hablando de Angelina Jolie, y aunque es cierto que sobre gustos no hay colores, la verdad es que hacía décadas que no contábamos con una estrella de cine con un físico tan espectacular unido a una personalidad tan carismática. Y pasarán décadas hasta que alguien consiga arrebatarle el trono, seguro. Porque guapas hay muchas (y con ayuda de la cirugía plástica pues aún más), pero Angelina, sólo hay una… (Por mucho que Megan Fox le haya copiado el estilo)

Si alguien dudaba si una Venus angular aporta belleza, que miran a Ange… Su tierna Venus en Cáncer le vuelve dulce, aniñada, hasta te dan ganas de cuidarla… Pero cuidado, porque estamos ante una mujer con Venus en cuadratura a Urano. Es bastante más hard-core de lo que a simple vista parece. Urano en la casa cuatro suele marcar una familia desestructurada. A Angelina le dolieron mucho las traiciones de su padre a su madre y esto es algo que sin duda ha marcado su existencia y sus relaciones posteriores.

Como buena Venus en Cáncer, adoraba a su madre, la tenía idolatrada hasta el extremo. Para ella fue una maestra, un ejemplo, una mujer fuerte… (Luna en Aries en casa 9) Lástima que el cáncer se la arrebatara sin piedad (Luna oposición Plutón) y que esto marcara el resto de su existencia, hasta el punto de llegar a someterse a una masectomía preventiva por miedo a desarrollar la misma enfermedad (no olvidemos que el pecho es una zona del cuerpo que se asocia con el signo de cáncer)

Con esta Venus, tampoco es raro que en la vida de Angelina Jolie la maternidad sea algo tan importante. En 2002, cuando Saturno se aproximaba a perfeccionar una conjunción con su Sol en Géminis, Angelina adoptó a Max, su primer vástago. Y es que si bien no tenía su vida sentimental resuelta en aquellos momentos, ser madre era algo prioritario para ella.

Después conoció a Brad Pitt, el hombre de su vida (sobre su relación hemos hablado en este post) y la familia ha ido creciendo considerablemente. ¿Quién iba a decir que aquella jovencita amante de los tatuajes que presumía de bisexual, jugaba con cuchillos y llevaba colgada al cuello la sangre de su novio iba a convertirse en la madre ideal? ¡Pues sí! Y no es tan raro… Al fin y al cabo, estaba escrito en las estrellas…

¡Os dejo su carta por si os animáis a comentar!